"Además de ser `oxigenadores` del paisaje urbano, las plazas y los parques son los únicos lugares en donde todavía palpita nuestro pasado. En efecto, la excavación arqueológica de estos espacios, desnuda y muestra ese acervo cultural aún oculto detrás de una fina capa de césped.
(...) Los terrenos públicos y privados se excavan con enormes topadoras en sólo días para nuevos edificios e instalaciones de cañerías. Esto no está ni bien ni mal, se hace en función del modelo de sociedad que queremos; podemos conservar nuestros centros históricos o destruirlos, o nuestras plazas o edificios históricos, esa es una decisión de la sociedad en su conjunto (mi postura personal es una más solamente); pero debemos tener claro que las plazas y parques, además de su valor histórico. cultural y patrimonial, son el único lugar que guarda evidencias materiales del pasado bajo su suelo que no han sido casi alteradas.
Son el reservorio arqueológico del pasado hacia el futuro. Sí pueden ser modificadas pero con la intervención de expertos que recuperen la información que hay bajo el suelo. Si no cada vez que se haga un agujero –para algo muy útil o muy inútil —, se destruirá un patrimonio irrecuperable; no importa que el pasto vuelva a crecer, lo de abajo habrá sido destruido para siempre."
Daniel Schavelzon
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Gracias, Elena Dutruel.
1 comentario:
que bueno el articulo
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