En sus orígenes, las banderas solían ser cintas o lazos. El origen de la palabra proviene del latín bandus, que quiere decir precisamente eso: lazo. Las dificultades en el proceso de constituir una nación y representarla por medio de un símbolo se reflejan en la variedad de banderas enarboladas en nuestro territorio desde la llegada de los españoles hasta 1852.
Creada por Manuel Belgrano el 27 de febrero de 1812 y adoptada como tal por ley el 25 de julio de 1816, fue anunciada así al Triunvirato en Buenos Aires: "Siendo preciso enarbolar bandera y no teniéndola, mandéla hacer blanca y celeste, conforme a los colores de la Escarapela Nacional. Espero que sea de la aprobación de V.E." Más adelante, su autor consolidaba su anuncio: "Este será el color de la nueva divisa con que marcharán al combate los defensores de la Patria" (13 de febrero de 1813).
Ya hemos presentado algunas ideas alusivas a este acontecimiento. Y nos referimos a la propuesta Alta en el cielo (primer verso de la oda popular Aurora), iniciativa del periodista rosarino Julio Vacaflor, bandera argentina de alrededor de 14.000 m. que cada año continúa creciendo con vistas al 2012, año del Bicentenario de la Creación de la Bandera.
Acercamos canciones y poesías alusivas, así como sugerencias para el nivel inicial.
Pero muchas veces la creación invisibiliza a su creador en toda su potencia. Recordando los ideales y la acción de Manuel Belgrano, destacamos que, lamentablemente, poco tratamiento escolar han merecido su pensamiento económico:
“Si es cierto, como lo aseguran todos los economistas, que la repartición de las riquezas hace la riqueza real y verdadera de un país, de un Estado entero, elevándolo al mayor grado de felicidad, mal podrá haberla en nuestras provincias, cuando existiendo el contrabando y con él el infernal monopolio, se reducirán las riquezas a unas cuantas manos que arrancan el jugo de la patria y la reducen a la miseria”; así como el educativo:
“…(el maestro) procurará en su conducta …inspirar a sus alumnos amor al orden, respeto a la religión, moderación y dulzura en el trato, sentimientos de honor, amor a la virtud y a las ciencias, despego del interés, desprecio a todo lo que diga a profusión y lujo en el comer, vestir y demás necesidades de la vida, y un espíritu nacional, que les haga preferir el bien público al privado, y estimar en más la calidad de americano que la de extranjero” (Reglamento para las escuelas que donó).
Ver Un prócer para armar.
Para saber más.
4 comentarios:
Así es, recuerdo que hay un premio nacional de economía que lleva su nombre
Es cierto, la escuela recalca mucho en Belgrano la creación de la bandera, como si fuera lo único, si bien importantísimo, que hizo.
sumamente creativa la propuesta de Belgranao para armar.
Me doy cuenta que sabia poco de Belgrano, salvo la creación de la Bandera.
El dijo "El miedo sólo sirve para perderlo todo."
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